BLUM MAGAZINE

Por: BLUM

La artista mexicana presenta este tema como un adelanto de su próximo EP, con el que explorará la evolución emocional tras una ruptura amorosa.

Hablar de Natáliyah Bravo significa adentrarnos en el eclecticismo, misticismo, sensibilidad, fuerza y entrega al arte. Originaria de un pueblo pequeño de México, la enigmática cantautora logra fusionar su profundidad y poder vocal con una cosmovisión sonora que va del R&B alternativo, al pop experimental y la producción electrónica.

Además de ser la compositora, productora e intérprete de sus obras, Natáliyah también se encarga de crear el arte visual de su proyecto, lo que la ha ayudado a consolidar un trabajo integral y multidisciplinario que, en sus propias palabras, busca «ser un puente entre lo humano y lo sublime«.

Tras varios años de integración personal y artística, la música regresa con una nueva visión, cuyo objetivo, es trascender criterios de la validación algorítmica y comercial en la música, para abrir e impulsar nuevas fronteras que les permitan, a propuestas de alto valor artístico, coexistir en el reconocimiento mainstream de la industria musical.

Hoy, presenta «In War«, un tema que habla de la guerra como una metáfora al dolor que implica finalizar una relación amorosa, en la que los comportamientos tóxicos e inconscientes predominan.

Esta canción navega entre la oscuridad y el duelo, como parte de un proceso de desapego y evolución emocional. En una perspectiva más amplia, «In War» es el primer capítulo de un EP conceptual que, acompañado de su narrativa audiovisual, busca contar la historia de cómo un «desamor» se tornó en un portal de sanación personal.

A nivel emocional, es la unión de lo etéreo con lo mundano; un viaje inmersivo, una experiencia sonora que logra fusionar géneros que parecerían no tener nada en común, de tal manera, que es difícil delimitarla a una sola vertiente. Se le puede definir como la mezcla entre el R&B alternativo, pop experimental y la electrónica.

Esta canción fue escrita por Natáliyah hace más de 5 años y fue su primer trabajo como productora musical. Eventualmente, encontró su sonoridad final gracias a la colaboración de Diego Demarco, quien coprodujo con ella los últimos detalles clave de la canción; además cuenta con la mezcla de Nacho Sotelo y la masterización de Juan García.

Su próximo EP es un proyecto bilingüe que fusiona géneros, sonidos y tendencias, que convergen por su meticulosa producción y la visión de profundizar en las emociones y sus distintos matices.

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