BLUM MAGAZINE

Por: Karla León

La cantautora pone al descubierto un universo lírico y sonoro entre ritmos de UK garage, drill, techno, club y drum & bass.

Paola Maldonado, mejor conocida como Foudeqush, publicó ANGELA, su primer material discográfico, con el que pone al descubierto un nuevo universo lírico y sonoro, entre ritmos de UK garage, drill, techno, club y drum & bass.

Inspirada en los animes «Haibane Renmei» y «Serial Experiments Lain«, Foudeqush explora un punto de vista más centrado en ella y su alter ego, pues toca temas tabú como la sexualidad, las drogas y la vida nocturna, mientras explora vivencias y ambientes con los que cualquier persona podría interactuar directa o indirectamente.

«Angela» es el primer nombre de pila de la artista, y en esta ocasión, utiliza la sátira, pues en su mayoría, el contenido es contradictorio a la imagen de un ser puro e inocente.

Foudeqush inició su camino en la música como parte del colectivo Kiddie Gang y, tras una pausa, desarrolló su proyecto solista para hablar sobre desamor contemporáneo, a través de géneros como el pop experimental, el hip hop, trap y lo-fi.

Este proyecto es la voz de una chica que le canta al amor contemporáneo, a los corazones rotos, al miedo, a la soledad. Sus letras van de sensaciones puras a descripciones concretas, y siempre busca una constante experimentación melódica con la que, al mismo tiempo, honra sus influencias. Foudeqush es una mezcla perfecta entre nostalgia y dulzura.

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